Los análisis de ADN han confirmado la identidad del cadáver localizado el pasado martes en el cauce del río Turia, a su paso por el término municipal de Manises. Se trata de Javier, un hombre de 56 años que desapareció el pasado 29 de octubre durante la DANA, tras ser arrastrado por la fuerza del agua en la localidad de Pedralba.
El Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana ha informado que el juzgado de guardia de Quart de Poblet ya ha recibido el informe de identificación realizado por la Guardia Civil, así como el informe de autopsia elaborado por el Instituto de Medicina Legal (IML) de Valencia.
La tragedia de Pedralba
Javier desapareció junto a su hija, con síndrome de Down, cuando se encontraban en una vivienda en el campo de Pedralba. Si bien la Guardia Civil pudo localizar el cadáver de la joven días después, su padre permanecía desaparecido hasta esta semana.
El cuerpo fue encontrado el martes por la tarde por empleados de la empresa pública Tragsa que realizaban labores de desescombro junto al río Túria. Las primeras hipótesis, basadas en la zona y el estado del cuerpo, ya apuntaban a que podría tratarse de Javier.
Víctima reconocida legalmente
Cabe destacar que Javier, al igual que las otras dos personas que aún siguen desaparecidas, ya había sido declarado legalmente fallecido el pasado 6 de marzo a través de un decreto del Juzgado de Primera Instancia de Valencia, en el marco de un expediente civil de jurisdicción voluntaria.
Su fallecimiento figura en el cómputo de las 229 víctimas mortales por las que actualmente se sigue la causa penal por la DANA, que se halla en fase de instrucción en el Juzgado número 3 de la Sección Civil y de Instrucción del Tribunal de Instancia de Catarroja.
Dos desaparecidos aún sin rastro
Con la identificación de Javier, todavía permanecen desaparecidas dos personas cuyos cuerpos siguen siendo buscados por la Guardia Civil en diferentes zonas de la provincia de Valencia:
Elizabeth: Cuya madre, que viajaba con ella en un coche en Chiva, fue hallada fallecida días después.
Francisco: Un hombre de 64 años que logró salvar a sus dos nietos (de cinco y diez años) al subirlos al techo de un coche en Monserrat.







